lunes, 11 de octubre de 2010
Corría el año 1984 y yo tenía 6 años. Fue un amor a primera vista. Estaba en un bar de mi barrio con mis padres y vi ese artefacto tan atractivo con la marquesina de "Skorpio". Era tan bajito que no alcanzaba a los mandos ni a ver bien la pantalla. Fue entonces cuando convencí a mi madre para que me dejara jugar. Me dio cinco "duros" y me subí en una silla para poder disfrutar de esa novedad en su plenitud. La maquina mostraba el típico gameplay"demo" y yo estaba deseando jugar. Cuando introduje la moneda la pantalla se volvió negra con el clásico "Press start", pero yo no sabía inglés y probablemente tampoco sabía leer, asi que me asusté pensando que había roto algo y me bajé de la silla quejandome a mi madre de lo que me había pasado, pero ya no me dio mas dinero y algun listo aprovechó mi partida sin duda. Pero volví, poco despues, para jugar mi primera partida de la historia a un arcade.

Era el Burning rubber aka Bump'n'jump (1982) de DATA EAST.
Mi primera partida duró unos segundos, pero el juego me fascinó rapidamente. Se trataba de un juego de coches con scroll vertical en la linea del Spy hunter o el road fighter, donde tenías que esquivar a tus competidores, esquivar manchas de grasa y otros obstaculos. Tenía la particularidad de que podías saltar y aplastar rivales. Los enemigos podían ser coches o camiones. A los primeros los podias echar de la carretera o aplastarlos, pero a los camiones solo podias aplastarlos, y si les chocabas morias. De vez en cuando la carretera se partía y había que saltar para no caer al agua, y te avisaba una exclamación en pantalla. Como la mayoría de juegos de estos tiempos, el juego era dificil hasta que descubrias la mecánica. Cuando esto ocurría podias jugar hasta el infinito (o en su defecto cuando el bar tenía que cerrar).

Como todo buen juego arcade de los '80 tuvo sus conversiones a sistemas domésticos como el Commodore 64, 2600 o Colecovision entre otras, pero la palma se la llevaba la famosísima y exquisita versión de NES, que en Japón se lanzó con el nombre de Buggy Popper (バギー・ポッパー?), que como venía siendo contumbre en la mítica consola era bastante fiel al Arcade y resultaba muy divertido.


Esta fue mi primera incursión en el mundo de los videojuegos, y guardo un recuerdo especial de este juego. Si en su dia se te escapó esta joya, o quieres revivirlo, te invito a que lo pruebes en MAME o cualquier otro emulador (si no lo has hecho ya). Esta ha sido mi presentación formal. Siguiente entrega, KUNG-FU MASTER. Sin más que añadir os dejo un video de este clásico.






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